lunes, 29 de abril de 2013

El fontanero viene a mi casa y me acaba follando el culo



Una incesante gotera en el piso de un joven, hizo que el teléfono de Danny, un reputado fontanero en su ciudad por el sector femenino, sonara para una nueva urgencia. Al parecer, una tremenda rubia en el piso de arriba, estaba haciendo emanar desde su coñito una fuente inagotable de puro placer. Pero Danny tenía bajo su uniforme la herramienta necesaria para reparar aquel despropósito: una monumental polla dispuesta a desatascar el coñito y el ojete de aquella rubia insaciable.

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