sábado, 17 de noviembre de 2012

Llegamos al hotel y nos ponemos a follar!



Al llegar al hotel lo que harán algunos, por no decir la mayoría, es echar una ojeada a la habitación, contemplar las vistas y, tal vez, deshacer la maleta o ver que canales tiene la televisión, pero en compañía de Connie eso no es lo primero que uno desea. Lo que uno quiere es colgar el cartel de "Por favor, no molesten", cerrar la puerta y probar la cama como es debido. Más aún cuando ella se muestra tan sonriente, tan contenta y tan cariñosa; más aún cuando sabes que no lleva braguitas, ni siquiera sujetador, que bajo ese finísimo vestido no hay más que su piel ansiosa de caricias, ese cuerpo voluptuoso, caliente, rotundo.... Ya habrá tiempo de todo lo anterior, ahora es momento de saborear su sexo y escuchar sus gemidos.

0 comentarios:

Publicar un comentario