Dandole una buena follada de propina a la camarera

Cansada y harta de ver la caja del restaurante vacía una noche tras otra, la explosiva camarera Jacky y su compañero decidieron pensar en alguna idea para no tener que cerrar. Después de meditar un buen rato, la mejor idea fue incluir el tremendo par de tetas de la simpática Jacky en el menú. Y al parecer funcionó, y si no que se lo pregunten a Voodoo, el afortunado cliente en probar tan placentero método y dar buena cuenta del cuerpazo de la camarera.