sábado, 30 de marzo de 2013
Llegando a un acuerdo con la agente Veronica Avluv
Veronica Avluv era una policía estricta e inflexible en su trabajo, y aquel coche mal estacionado no tenía posibilidades de librarse de una buena sanción. Justo en ese momento apareció Manuel, el propietario del vehículo, quien parecía dispuesto a negociar la multa, pero con la señora Avluv no había manera. Manuel no llevaba dinero en metálico, así que le ofreció a la agente acompañarle a casa de un amigo para pagar. Él comenzó a masturbarse en una habitación pensando en el enorme par de tetas de aquella tremenda policía que le pilló in fraganti con la polla en la mano. A Veronica le encantó aquella empalmada porra más que la suya, así que no tardó en echar mano de ella para llevársela a la boca y disfrutar follando echando un polvo con todas las de la ley.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario