Rompiéndole el culo a una joven deportitsta

Cuando más fuerte apretaba el calor de aquella soleada mañana, pillamos a la joven Casey practicando baloncesto en la pequeña cancha de su chalet. Su minúsculo pantalón y su pequeña camisetita de tirantes parecían molestarle, así que decidió quitárselo todo y seguir ensayando desnuda. Pero algo le llamó poderosamente la atención, no era la cámara, se arrodilló sin más y comenzó a chupar aquella polla que tanto se alegraba de ver su culito pegando saltos, pero hacía demasiado calor, era hora de meterse dentro y seguir nuestra fiesta particular. Dentro continuó con su peculiar lucha lamiendo y lamiendo, pero había llegado el momento de gozar embistiendo con fuerza aquel apretado y tierno ojete mientras Casey gemía entre el gusto y el dolor.